Por fin, por fin y por fin termino los lápices y la tinta del primer capítulo de Miguel Hernández, La Fontana Eterna, cuyo título (el del capítulo, claro) es Las Abarcas Desiertas.
Como sabéis, este proyecto lleva más de dos años gestándose, y las cinco primeras páginas de muestra no solo llevan año y medio hechas, sino que se han visto remodeladas varias veces. Esto, unido a que se trata del capítulo más largo de la obra, han hecho que sea un alivio inexplicable el poder escribir con pluma la palabra "FIN" en la última viñeta. Esta tarde esbozaré el segundo capítulo (de aquí en adelante ya son más cortitos) y mañana posiblemente lo dibujaré entero, y quizá entinte parte de él. Aunque no quiero compremetreme conmigo mismo y con vosotr@s a cosas que no sé si mi recién inaugurado trancazo de moqueras me permitirá cumplir.
En fin, lo importante de esto es que, pasados los portfolios de Ficómic y ya solo con este proyecto (prácticamente) entre manos, he cogido el ritmo, y podré entregarlo entero en los plazos estimados.
Espero poder ir enseñando cosillas en breve! y os mantendré al tanto de la evolución del proyecto!
No hay comentarios:
Publicar un comentario